¿Puedo usar mi auto para trasladarme junto con mi paciente?

👉🏻Si bien siempre se plantea el escenario del caso por caso, es importante que toda intervención tenga un objetivo terapéutico, y desde ya que no obture este objetivo, siendo que planteamos el rol del AT como una muleta imaginaria, es decir, que el paciente logre sostener lo trabajado permitiendo que el AT se corra.
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🔸En este sentido, cualquier recurso que habilita una consigna o actividad en el espacio del acompañamiento, debe ser un recurso del paciente, que el paciente cuente con la posibilidad de realizar dicha actividad aún por fuera del espacio de AT. Es por esto por lo que no es conveniente utilizar el medio propio para trasladarse con el paciente, ya que se genera cierta dependencia de este para llevar adelante las consignas del espacio.
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🔹Esto no sería terapéutico, ya que no se estaría trabajando con los recursos del paciente. Por otro lado, es importante pensar por qué utilizaría mi auto para trasladarme con el paciente, ya que muchas veces aparecen motivos personales para el uso como la comodidad, o para poder “aprovechar más el tiempo del acompañamiento”.
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🔸La realidad es que, si para realizar una actividad dependen del vehículo del AT, entonces el paciente no cuenta con los recursos para realizar esta actividad. Más allá de las cuestiones éticas que entran en conflicto frente a este escenario, hay que saber ubicar también la responsabilidad legal que implica el traslado de un paciente, ya que uno no está trasladándolo como particular, sino que lo hace en el momento en que ocupa un rol profesional..
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🔹En este sentido, si quisiera contar con mi vehículo para trasladarme con el paciente, y hago caso omiso a la ética que me lo impediría, debo contar con un vehículo habilitado para el traslado de pacientes con discapacidad, además de contar con un seguro que cubra cualquier accidente que pudiera dañar la integridad del paciente durante el mismo.
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🔸Es decir, en líneas generales, no corresponde el uso de un vehículo propio para el desarrollo del acompañamiento, y aún si esto no fuese de consideración para el AT, existen una serie de obstáculos legales que en general no se cumplen, por lo que desalentamos enfáticamente considerar esta opción. En tal caso se puede trabajar con el paciente en tramitar un transporte brindado por su obra social, o la adaptación al uso del transporte público.